sábado, 8 de septiembre de 2012

Ahám.

Bueno, aquí un pequeño vídeo de motivación. Es precioso, y no digo más, no hacen falta palabras.


lunes, 27 de agosto de 2012

🔞 JAJAJAJA.

   Bueno pequeños lectores, como ya os habréis dado cuenta, he dejado esto un poquitííín de lado (pero na eh, solo un poco) así que me he puesto las pilas y pienso volver con más ganas, muchos textos, y mucha muuuucha diversión 💃 ¡Olé! 
Nah, es coña. Lo que sí es verdad es que voy a volver, es más, publiqué una nueva entrada si os disteis cuenta ⬇⬇⬇ y eso, que es queso. 
Sé que esto lo leen cuatro gatos 🐱, pero aún así muchas gracias por leerlo y vuestro apoyo, en serio.
También sé que os habréis percatado (supongo) de que he instalado el emoji en el Ipod y que por eso os doy tanto por culo con las caritas, pero como es mi blog os jodéis😁

   Por último (y una 💩 aún os queda un rato) quiero pediros un favor:
Aparte de esto, me gusta escribir relatos, novelas. Y tengo otro blog en el que estoy escribiendo una. Así que os lo agradecería muchíííiísimo si cuando tengáis un hueco libre (que es verano, así que levantad el culo del sofá y hacedme el favor, vagos de mieeerda, con cariño) entráis en el blog y le echáis un vistazo.
Si os gusta 👍 podéis difundirlo por todas vuestras redes sociales, ¡Es super divertido! 😃
Bueno, no lo es, pero os lo agradecería taaaaaaaaanto, enserio.
Aquí el link del blog: 
http://hastadondelaimaginacionllegue.blogspot.com.es/?m=0

   También, si queréis hacerme alguna pregunta o algo, aquí mi ask: 
http://ask.fm/creadoradesonrisasanonimas

   Y eso, creo que por mi parte nada más que decir, que buen verano (lo que quea, porque ya...), que mucha suerte a los que tengan que recuperar en Septiembre 👍
¡Y que un besazo a todos!❤

   PD: ¡Descargaos los emoji, que molan mucho! Y si no los ves te jodes JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAcon amor<3
Ah y las caquitas sonrientes 💩, son las mejores. 

   Veeeenga, ya sí que sí, ¡feliz lo que sea chicos!❤

Silence.

   A veces el silencio no es la mejor opción. Dicen que solo hay uno, que es fácil. Mienten.

   Hay silencios divertidos, en los que intentas aguantar la risa; silencios absurdos, que no deberían estar ahí;  silencios incómodos, en los que no sabes si irte o quedarte; silencios de absoluto orgullo, en los que desearías poder decir "te echo de menos, lo siento". Silencios que esconden palabras, sonrisas, sentimientos. 

   Nos empeñamos muchas veces en romperlo, cuando no es necesario. Cuando estamos con la persona que queremos, y no necesitamos palabras, cuando una mirada y una sonrisa lo dicen todo. 
Pero sin duda, el peor silencio es el que ya no puedes romper, el que está dentro de ti. Se pasó el tren, perdiste la oportunidad. Lo que tenías que decir ya no importa, no tiene relevancia. 
Vivo por fuera, muerto por dentro.
¿No parece agradable, eh?
No lo es.
Y todo por callarte ese maldito "te quiero". O cualquier cosa que desearías haber dicho. Se lo tragó el silencio y el tiempo se encargará de guardarlo fuerte en tu cabeza. Y tendrás que vivir con ello.
El silencio no es malo, solo que hay que saber cuando romperlo. No te equivoques, no te precipites, solo escucha. Y cuando llegue el momento de hablar, lo sabrás.

   Y decían que el silencio era sencillo.

domingo, 29 de julio de 2012

Tu recuerdo.

Es curioso, una vez pensé que sin ti moriría, y aquí sigo. Bañando los recuerdos en un vaso de vodka, ahogando las penas que no paran de multiplicarse. Es difícil explicar lo que era que el mundo se me cayera encima cuando te veía marchar, pero aún lo es más ahora que lo has hecho sin ni siquiera mirar atrás. No te has detenido ni un segundo a pensar en lo que hacías, te pusiste una venda en los ojos y caminaste hacia delante, dejando atrás el pasado.

Quién diría que nuestro presente se antojara ahora tan lejano.
Que las sonrisas que reservábamos para después han caducado, y que no hay ticket de devolución.
Que el futuro que escribimos en una vieja lista de la compra acabó en la misma caja donde metiste todos tus sentimientos y lanzaste al vacío sin piedad. Y que mi corazón iba dentro.
Lo peor son las noches, cerrar los ojos y ver que no hay nada, que aquellos sueños se han ido sin dejar rastro. Como tú.
Que te has llevado mis lápices de colores con los que pintabas cada día de un color distinto, esperando verme sonreír. Y ahora levantarme cada mañana me pesa una tonelada.
Que difícil es aguantar la sonrisa aunque sea de verdad. Aguantar las lágrimas delante de un público que solo espera verte fallar. Tener que levantarme sin tu ayuda.

Y no quiero joder, no quiero volver a llorar. Aquel extraño lleva tu olor y cerrar los ojos e imaginarte es inevitable. Sin duda fuiste un error, pero no dudes que fuiste mi error favorito. Y que si tuviera la oportunidad de borrar todos esos recuerdos y momentos vividos, los dejaría todos intactos. Que sigo viva, sí, pero es que lo mismo que me mata es lo que me hace fuerte y me ayuda a levantarme cada mañana.
Tu recuerdo.

domingo, 15 de julio de 2012

Polos opuestos.

Es la misma rutina, el mismo jodido juego. Vivimos compitiendo, tú golpeas, yo golpeo. Tú te vas, yo vuelvo. Tú corres, yo vuelo. Tú me ignoras, yo te recuerdo. No sé quién de los dos merece más el infierno.

Estamos condenados a jugar, a perdernos en infinitas miradas y sonrisas, a despertarnos cada mañana con ganas el uno del otro. Tú sonríes, yo río. Tú lloras, yo sufro. Tú me buscas, yo me dejo encontrar.
Somos polos completamente opuestos, sin nada en común, pero nos complementamos el uno al otro. Tú sabes que no puedo vivir sin ti, y tú sabes que no puedes vivir sin mí. Nos peleamos, nos buscamos, nos coordinamos y nos matamos. Y nos drogamos sí, el uno del otro. Nos drogamos con grandes dosis de sonrisas, mordiscos, besos, abrazos, caricias, perfumes y risas; somos adictos a todo esto, al uno del otro. Sabes que si tú te pierdes yo iré a buscarte, y que si yo me marcho tú no tardarás ni un segundo en buscar las huellas de mis tacones, dispuesto a encontrar el camino que te lleve de vuelta hacia mí.
No necesito nada más que el sabor de tu risa en mi boca, la cama desecha con tu aroma, la almohada pidiendo a gritos que vuelvas y tu camisa sobre mis hombros esperando a que vengas a abrazarme y la contagies de nuevo con tu olor.

Y es que somos polos opuestos, y los polos opuestos se atraen.

jueves, 5 de julio de 2012

B̶u̶e̶n̶o̶s̶ días.

¿Buenos días? Y una mierda. Mientras no seas tú quien me despierte con una sonrisa, son días asecas. Una monotonía de días que paso sin tenerte ni abrazarte. No me digas buenos días teniendo tú la culpa de no hacerlos buenos y el remedio para solucionarlo. No serán buenos días mientras pase la noche buscando tus brazos y la cama se me haga más grande que nunca sin ti. No lo serán mientras sea otra la que duerme a tu lado. Así que no me digas buenos días, porque tú tienes la culpa de mis cambios de humor, mis resacas, mis miradas perdidas y mis sonrisas tontas. Ni siquiera serán buenas tardes, ni buenas noches si no eres tú el que está a mi lado.
Y no serán buenos días hasta que no seas tú quien me despierte, así que cómete los buenos y déjame a mi que cuente los días que paso sin tenerte.
                                           
                                                         

Remember me.

Recuerda lo que dije cuando sea yo quien te haga daño a ti. Cuando tengas que sufrir por las noches porque no estoy a tu lado. Cuando te diga a la puta cara que ya no te necesito y que es otro el que me hace feliz. Cuando rompa la caja en la que metimos todos los recuerdos. Cuando notes que vas olvidando mi risa y te cueste respirar. Cuando te gires y te des cuenta de que ya no estoy ahí. Cuando tengas que aprender a vivir sin mí. Cuando intentes olvidarme durmiendo con otra al lado, con una que acabas de conocer y de la que ni siquiera recuerdas el nombre. Cuando llores y te mates a cabezazos por perderme.
Recuérdame cuando te dije que algún día aprendería a vivir sin ti, y que ese día te arrepentirías de haberme perdido.

martes, 19 de junio de 2012

Ay.

-¿Qué?

+Nada.

-No enserio, ¿qué pasa?

+Nada, tan solo pensaba.

-¿Y en qué piensas?

+En ti.

-¿En mí?

+Sí, en tu sonrisa, en tu dulce voz, en tu mirada, en como me susurras que me quieres y se me ponen los pelos de punta. Pienso que eres la persona que siempre había estado buscando y que no voy a dejarte escapar. Que te necesito aquí siempre, conmigo.

-Joder, te quiero.

+Y yo a ti.

-Y ahora, ¿en qué piensas?

+En ti.

-¿Todavía?

+Siempre.

lunes, 18 de junio de 2012

You're for me and I to you.

  "No sé, es difícil. Tal vez esté buscando donde no debo. Tal vez esté intentando encontrar algo que no está ahí, que nunca ha estado. Tal vez sean imaginaciones mías.
Tu voz, tu risa, tu mirada, tu pelo, tu sonrisa. Y esas ganas de gritar que me produces. Ese torbellino de sensaciones. Esa bipolaridad. Pero es que no sé si es verdad. Estás aquí, allí. En mi cabeza. Tan real que casi te puedo tocar, que casi puedo imaginarte aquí, conmigo. No puedo, no estás aquí. Que te busco y no te encuentro. Que se que estás ahí, en alguna parte. Que tal vez no me estés buscando. Tal vez ni siquiera sabes que existo. Tal vez ni siquiera existes. Tal vez pierda la mitad de mi vida buscándote.
Pero una cosa es segura: no voy a parar hasta encontrarte."

  Y los dos pensaron lo mismo.

                                             

sábado, 26 de mayo de 2012

Hey idiot, I love you.

   Te necesito aquí, conmigo. Ver tu sonrisa todos los días, contagiarme con tu risa y que me calles con un beso. Abrazarte y recordarte cada minuto todo lo que significas para mí. Juntar nuestros labios en un aquí te pillo aquí te como. Notar como sonríes en la oscuridad y saber que no es un sueño. Que me despiertes con un "buenos días princesa" y te despidas con un beso. No pido mucho, simplemente que estés aquí, que seas más que un pensamiento. Tenerte aquí y abrazarte, que me hagas reír como solo tú sabes, que me quieras y me calles con un puto beso sin preguntármelo, que seas el más estúpido del mundo cuando esté de mala leche y que estés ahí cuando lo necesite. A cambio te daré todo, las mejores de mis sonrisas que solo reservo para ti, los mejores momentos de mi vida pasarlos junto a ti, demostrarte que no eres alguien más, porque no lo eres, eres especial. Te daré mis noches y mis días, mis secretos y mi vida, lo que me pidas.

   No puedo prometerte que todos los días me despertaré con el mismo sentimiento del día anterior, no puedo garantizarte que te querré por y para siempre, pero sí que haré que todos tus días sean especiales, que renunciemos a la monotonía. Haré de tus noches y días los más perfectos que hayas vivido y tus malos momentos los convertiré en alegrías. Y no seré perfecta, pero intentaré serlo por ti.

   Ya he caído, caí hace mucho tiempo. Y no en una piedra, sino en un agujero, tan profundo como tus ojos. Tus hermosos ojos, como me encantan. Tanto como tú, imbécil. Como tus tonterías y tus manías. Pero lo que más me gusta, sin duda, son tus imperfecciones. Esas imperfecciones que te hacen tan real, que casi te puedo tocar. Que te hacen perfecto.
   Valiente gilipollez la verdad, pero es que hoy he estado pensando y me ha dado cuenta de que no soy tan diferente de la que era antes. Que sigo siendo la misma idiota que te quería.
                                   
                             
                                           

domingo, 15 de abril de 2012

Wow.

   Tú, sí tú. ¿Quién te ha dado permiso para entrar? Ah no, que te has colado. Pues nada, bienvenido a mi corazón, disculpa el desorden, es que cada vez que alguien pasa por aquí lo destroza todo. ¿Compórtate eh? No quiero tener que echarte a patadas, pero dudo que pudiera, ahora que has entrado no tengo ganas de que te marches. Aunque la verdad es que tampoco quiero que te quedes. No sé, estoy hecha un lío. Pero respóndeme a una pregunta, ¿cómo es que la cabeza te ha dejado pasar? Siempre os echa a todos a patadas, sabe bien lo que pasa con los capullos.

   Joder, ¿pero se puede saber qué has hecho? Has entrado y lo has desordenado todo, lo has puesto patas arriba. Donde tendría que estar el odio, ahora está el perdón. Donde tendría que estar el recuerdo, ahora está el olvido. Donde tendría que estar el dolor, ahora está la risa. Donde tendría que estar él, ahora estás tú.

   Bueno, pensándolo mejor… tal vez no sea un cambio tan malo después de todo. Tal vez sea mejor perdonarle que pasarme la vida odiándole, olvidarle para siempre y con él los recuerdos amargos, reirme en su cara en vez de llorar escondiendo la mía. Y sobretodo, necesitarte a ti como nunca había necesitado a nadie.
Ahora no sé si estoy haciendo bien, no sé si es amor, capricho o deseo. No sé si quiero que te quedes o quiero que te marches. No sé si vas a ayudarme a arreglar esto o destrozarlo y añadirlo a otra joya de tu colección. No sé nada, o casi nada.

   Solo sé, que me he vuelto adicta a tu sonrisa, y que si la tuya aparece, la mía viene después.

jueves, 12 de abril de 2012

Baah.

  Que no puedo más, que la mentira me supera. Que hace tiempo que dejé de sentir, de sonreír como el primer día, de verte con los mismos ojos. Que la sonrisa que me sacas, ya no es la misma. Que mi corazón a dejado de acelararse cada vez que te ve, que ya no me pregunta por ti.

  Has estado tanto tiempo lejos de mí, que mi corazón a aprendido a vivir sin ti, a no necesitar tu sonrisa todos los días, a no ver tu rostro todas las mañanas.

  Quería olvidar el pasado, y he olvidado a la persona equivocada. Lo siento, pero ahora el aire que necesito respirar no es el de tu aliento.

sábado, 31 de marzo de 2012

El amor nos vuelve tontos.

+¿Sabes? A veces pienso que esto no es real.

-¿Por qué dices eso?

+Porque no me creo que alguien como tú esté con alguien como yo.

-¡Ja! ¿Eso es un insulto?

+¡Pues claro que no! Es todo lo contrario. Tú eres el típico chico malo y guay, y yo la típida niña tonta.

-Pues sí, eres muy tonta.

+¿Ves? Hasta tú lo dices…

-Digo que eres tonta por pensar en eso. ¿Cómo no iba a estar alguien como yo, con alguien como tú? Si eres perfecta.

+Vale, ahora el tonto eres tú.

-No soy tonto, soy realista.

+Eres un tonto mentiroso.

-Vale, soy muy tonto. Pero no un tonto ni mentiroso, ni guay, ni subrealista. Sino un tonto enamorado.

+Pues estás enamorado de una chica muy tonta. De otra tonta enamorada.

                                 

Hey! You're in love.

  Y llega un momento en el que te das cuenta. Tal vez sea por tu sonrisa o tal vez por ese cosquilleo en el estómago, pero lo sabes. Te has enamorado. Ya has pasado por esto antes, y sabes lo que se siente.
Y la verdad es que estás feliz, sientes mucha euforia, pero también miedo.
¿Miedo a qué? Pues a sufrir. Puedes darlo todo de ti, pero tal vez para esa persona nunca sea suficiente. Tienes miedo de que te rompan el corazón, porque después de mucho tiempo intentando reconstruirlo, ha llegado alguien a tu vida capaz de conservarlo intacto. Pero temes que no pueda hacerlo, o simplemente que juegue con él. No es un juguete, y sabes perfectamente lo que duele que se rompa.
No debes correr riesgos, sin embargo darías cuanto fuera por huir corriendo de su mano.

  Aquí es cuando la cabeza pregunta: ¿Merece la pena?
Entonces le miras, y una gran sonrisa aflora en tus labios, sin que puedas ni quieras evitarlo.
Y el corazón responde:
Si lo sabes, ¿para qué preguntas?

Anything.

  Hoy me he puesto a pensar y he llegado a la conclusión de que todo se ha acabado.
Repaso nuestras conversaciones y me pregunto qué fue del amor, de los sueños, de las ilusiones, de la felicidad, de la fe, de las alegrias, de la confianza, de la tristeza y peleas. Qué fue de nosotros.

  Nos fuimos separando poco a poco sin darnos cuenta, hasta estar tan separados que hicieramos lo que hicieramos, no podríamos habernos unido de nuevo. Y no lo entiendo, lo teníamos todo, todo a nuestro alcance, y sin embargo, ¿qué nos queda ya? Nada.
No nos quedan ni sonrisas, ni ilusiones, ni sueños, ni motivos, no quedamos ni nosotros mismos.

  Si tú y yo éramos todo explícame por qué quedó en nada, por qué nos perdimos a nosotros mismos.
Qué fue de nosotros.

sábado, 3 de marzo de 2012

Sigue siempre adelante.

  A veces creo que vivo en un mundo lleno de ilusiones rotas... Veo a la gente rendirse y pienso: "¿Pero por qué lo hacen? Si se rinden, ¿de qué les va a servir? Sería mucho más productivo seguir adelante e intentarlo con todas tus fuerzas. Porque vale, tal vez no lo consigan, pero al menos tendrán la satisfacción de haberlo intentado, de haber luchado con todas sus fuerzas por lo que querían y pensar que han dado lo mejor de ellos, a pesar de fracasar.
Pero qué diantres, ¿por qué tienen que fracasar? Si luchan, pueden conseguirlo. Aunque haya una sola posibilidad entre un millón, merece la pena intentarlo, porque nada es imposible. No, nada, si incluso ya se ha inventado ropa que no se moja o que no hace falta lavarla, si incluso el hombre ya ha llegado a la luna, ¿por qué iba a ser imposible lo demás? Pues no, nada es imposible.
Para llegar a lo más alto, hay que empezar desde abajo."

  Y muchas veces tengo ganas de rendirme, de sentarme a llorar, hundirme y darlo todo por perdido porque la situación me supera. Pero luego recuerdo mi lema de "Sigue siempre adelante", recuerdo a la gente que me apoya y me quiere, y sobretodo, la razón por la que lucho. También pienso que, ¿de qué sirve rendirse? Llorar no va a arreglar nada, hundirse no va hacer que las cosas mejoren, ni por asomo. Tienes que ser fuerte, demostrarles a todos que tú puedes conseguirlo.

  Además, luego veo la película de <<Descubriendo a los Robinsons>> y le doy fuerza a mis argumentos. Veréis, Lewis (el protagonista) es un pequeño inventor, y cuando fracasa siempre se da por vencido. Pero una vez intentando arreglar un invento suyo, algo falló, este explotó, y él se derrumba, en cambio los Robinsons (una agradable familia), le felicita y le aplaude. ¿Que por qué? Pues porque equivocarse es bueno, nos sirve para aprender, no rendirse nunca es lo mejor que podemos hacer, y como dicen en la película: "De las caídas se aprende, del éxito... no demasiado."
Por eso, aunque fallemos 100 veces siempre tenemos que volver a intentarlo, porque quién sabe si lo conseguiremos a la 101.
Si nos empeñamos en pensar que no lo vamos a conseguir, perderemos la oportunidad y la aprovechará otro... Por eso tenemos que luchar, porque nosotros somos el dueño de nuestro destino y nadie más. Por mucho que nos digan que no podemos, por mucho que fracasemos, debemos seguir, no por ellos, sino por nosotros mismos. ¿Es que no lo entendéis? Si no arriesgáis, no ganáis. Luchad por lo que quereis joder, que luego venis llorando por lo que perdeis.

  Y por eso mismo, porque veo a tanta gente rendirse me encantaría que siguieran mi consejo:
                 Nunca te canses de luchar, sigue siempre adelante.

domingo, 26 de febrero de 2012

Nadie como tú.

  Pues sí, es verdad. Es verdad que sonrío todo el rato porque me gusta. Es verdad que me peino a cada momento porque no puedo evitarlo. Es verdad que suelto cosas incoherentes, tonterías, de vez en cuando y sin pensar. Es verdad que cuando me aburro no paro de moverme. Es verdad que suelto muchos tacos. Es verdad que odio mis muñecas. Es verdad que no soporto a los cotillas y a los que se meten en la vida de los demás sin venir a cuento. Es verdad que soy bastante vaga. Es verdad que a veces no me importa una mierda lo que opinen los demás. Es verdad que no soporto ser el centro de atención. Es verdad que me encanta comer chucherías. Es verdad que hablo mucho. Es verdad que soy bastante payasa, cursi e hija de puta cuando quiero.

  Pero también es verdad, que te quiero. Que no me importa el donde si tú estás junto a mí. Que no puedo vivir sin ti. Que me haces falta. Que te necesito. Que eres mi mejor amigo. Que te quiero como a nadie en este puto mundo. Que odio verte mal. Que me mata verte triste...

  Y sin duda llevo razón, cuando te digo que eres importante para mí. Cuando te digo que eres mi mejor amigo. Cuando te prometo que nunca te voy a abandonar. Cuando te digo que lo que siento no se puede demostrar con palabras. Cuando te aseguro que solo quiero lo mejor para ti. Cuando digo que te quiero más que a mi vida. Cuando digo que la daría por ti. Cuando te digo que nunca te voy a olvidar. Cuando te digo que eres lo mejor que me ha pasado en mi puta vida. Cuando digo que todas las noches le agradezco a Dios el haberte conocido. Cuando te digo que eres la mejor persona que he conocido y la que, probablemente, más me haya querido. Cuando te digo que como tu no hay nadie. Cuando te digo que eres Hespecial.
Y es que puede que a veces no, pero en estos casos, siempre llevo razón.

Nada me enorgullece y honra más que el que leas esto, porque me encanta presumir de que tengo al mejor bff del mundo ok, porque se lo merece.

viernes, 17 de febrero de 2012

Be Happy.

  Es tiempo de ver quién quieres ser. Es tiempo de cambiar y volver a cambiar, de ponerlo todo patas arriba y volverlo a ordenar. Es tiempo de llorar sin razón y sonreír sin motivos, de reír hasta que no puedas más y llorar hasta que consigas reír. Es tiempo de enamorarte e ilusionarte, de soñar y amar, de comerte la cabeza y que te coman a besos.  Es tiempo de gritar con todas tus fuerzas para soltar lo que llevas dentro, de aferrarte y confiar en quién no debías, de equivocarte y caer, para levantarte y aprender de tus errores. Es tiempo de reírte de la vida, de no rendirse jamás, de salir corriendo a ninguna parte, sin que nada te pare. Es tiempo de bailar bajo la lluvia al son de tu corazón.

  Es tiempo de que te rompan el corazón, de aprender a olvidar, de decirle "te quiero" y que no lo abandonarás jamás. Es tiempo de llamar "putas zorras" a tus mejores amigas y "guapa" a tu enemiga. Es tiempo de salir y reírte con esas bobas. Es tiempo de aprender a amar.

  Es tiempo de estar feliz y triste al mismo tiempo. Es tiempo de ser todo y nada a la vez, de perderse y encontrarse de nuevo.
Es tiempo de ser feliz, de disfrutar.

                                                     

lunes, 6 de febrero de 2012

Ok.

Caminé rápidamente entre la gente, estaba deseando verle. Sabía que iba a pasar, lo notaba dentro de mi pecho. Llegué y lo busqué con la mirada.
PUUM. Allí estaba, de pie, con la mirada perdida, y entonces decidió mirar en mi dirección y posar su mirada en la mía. Mi corazón parecía que iba a sufrir un ataque. Me sonrió y vino hacia mi. Genial corazón, ahora no podré ni hablar por tu culpa, espero que al menos no te de un infarto.
-Buenas tardes -Dijo con un tono afable.
-Bue... Buenas tar... Eh... ¿Hace frío no?
Me miró extrañado. Perfecto tía, ya la has cagado. Pero entonces, soltó una risotada y me miró divertido.
-La verdad es que yo tenía pensado venir en bañador, pero si tu tienes frío debe de hacer bastante. -Dijo aún riéndose.- Seguro que de ser por tu madre serías el muñeco michelin.
Le sonreí tímida mientras él se reía.
-Bueno, ya sabes como son, si no te pones el chaquetón...
-Tranquila, la mía es igual, aunque no le hago mucho caso.
-Apuesto a que no le hacía mucha gracia eso de que vinieras en bañador. -Aunque alegrarías la vista, añadí para mí.
Soltó otra risotada y me sonrió. Dios me encantaba su risa, y tenía una sonrisa preciosa.
-Supongo que no mucho, pero de ser por mí habría venido así.
-¿Al parque en bañador?
-¿Por qué no? Es típico.
Esta vez la que soltó la risotada fui yo.
-Típicamente raro, ¿No? -Volví a reírme.
Él sonrió de nuevo.
-A ver, ríete.
De repente me avergoncé, odiaba mi risa, así que me puse seria y negué con la cabeza.
-Venga ríete -Me dijo con voz suplicante mientras yo volvía a negar con la cabeza.- Por favor, venga, ríete, sólo una vez.
Yo seguí negando pero una sonrisa iba aflorando en mis labios conforme me lo pedía.
-Entonces me voy a dar el paseo yo solo en bañador, cogeré una pulmonía y recaerá sobre tu conciencia.
Esta vez si me reí. Sonrió abiertamente.
-¿Ves? No era tan difícil. Me gusta tu risa.
-A mi no.
-¿Por qué? Es preciosa.
-Porque no. -Dije mientras tiritaba, estaba muerta de frío.
Él se dió cuenta y se quitó su chaqueta.
-Hagamos un trato, yo te dejo mi chaqueta si tú me dices porque odias tu risa.
-Eso es chantaje -Dije, pero sonreí y acepté el trato.
Me puso con cuidado su chaqueta sobre mis hombros, olía a él.
-¿Y bien?
Me quedé pensativa un momento:
-Pues porque... Suena fatal, me da vergüenza.
Entonces hizo algo que me dejó sin aliento. Acercó su cara a la mía, demasiado, y me susurró:
-Te debería de encantar todo lo tuyo.
-Y... Y eso por... ¿Por qué?
-Porque es tuyo.
Y dicho esto me besó, y mi corazón dio un vuelco. Esto no estaba pasando, era demasiado bonito para ser cierto. Se separó un poco de mí.
-Perdona es que... Estaba deseando hacerlo.
Esta vez fui yo quien le besó. Y nos quedamos así, besándonos, dios sabe cuanto, dios sabe como.

No sé si lo habréis sentido alguna vez, esa sensación de estar a 3 metros sobre el cielo. Ahora que recuerdo esto, lo que pasó en ese momento y todo lo malo que pasó después, me pongo a reflexionar y, ¿sabéis qué? He llegado a la conclusión de que los cuentos de hadas no existen. Si nos pasamos toda la vida esperando a que llegue un príncipe azul montado en un caballo blanco, lo único que pasará será nuestra vida. Disney nos engañó, no hay princesas, ni príncipes, ni sapos, ni brujas malvadas. Aquí cada uno es un personaje nuevo e interesante, y tu cuento, si quieres lo creas tú y sino nada.
Porque si pensáis que los cuentos de hadas existen, podéis cerrar los ojos y empezar a soñar, ya que lo más cercano que os vais a encontrar es a 3 metros sobre el cielo, vuestro príncipe azul un Mario Casas en una moto negra o un Edward que os espía por la noche, y en cuanto os despertéis volvereis a la cruda realidad.
A esta puta realidad.

lunes, 30 de enero de 2012

La vida es bella.

  ¡Buenos días princesa!
He soñado toda la noche contigo. Íbamos al cine, y tú llevabas aquel vestido rosa que me gusta tanto. Solo pienso en ti princesa, pienso siempre en ti.

domingo, 29 de enero de 2012

Si tú quisieras...

  Si tu quisieras... Te demostraría lo increíble que eres, que los cuentos de hadas existen, que la felicidad se encuentra más cerca de lo que piensas y que puedes tocar el cielo con las manos. Te enseñaría lo que es amar al infinito ida y vuelta, lo que es que tu vida dependa de otra persona y lo que puede hacer una lengua enamorada.

  Si me lo permitieras... me elevaría al mismo cielo para darles las gracias al dejar caer un ángel como tú, subiría a la torre más alta para gritarle a toda esa gente, que tú eres mi mundo. Inventaría canciones con nuestras historias, subiría a las nubes a cantarlas a los cuatro vientos, te haría feliz cada segundo de tu vida.

  Si sonríes, seré feliz. Si ríes, reiré contigo. Si lloras, te animaré. Si sufres, te amaré. Si mueres, moriré también.

  Si me lo pidieras... te enseñaría lo que es amar de verdad, lo que es sentirse a tres metros sobre el cielo, podría hacerte el más feliz del mundo, convertiría tus defectos en virtudes, nunca te abandonaría. Me marcharía y volvería las veces que me pidieras, daría la mismísima vuelta al mundo solo para hacerte sacar una sonrisa, subiría al espacio para robarle una estrella y regalártela, para que te iluminara en tus días de oscuridad. Te enseñaría que el amor no tiene límites, y te demostraría que los "para siempre" existen.

  Si tú quisieras... Te amaría más de lo que sé.

Y me gusta recordarte.

  Y aún me gusta recordar todo lo que fuimos. Todos esos buenos momentos compartidos, esas carcajadas hasta que nos dolía el estómago de reirnos, esas sonrisas que reservábamos el uno para el otro; esas situaciones en las que no decíamos nada, porque no hacía falta, con mirarnos a los ojos bastaba para entendernos; cuando compartíamos un beso en la boca del otro, cuando podíamos quedarnos abrazados toda la tarde, cuando un simple "te quiero" lo decía todo.

  Y aún más, me gusta pensar en todo lo que pudimos ser. Cuando imaginábamos aquel futuro juntos, aquellas vacaciones de ensueño, cuando hablabámos sobre lo que éramos y llegaríamos a ser, cuando deseábamos que fuera ya el día siguiente para volvernos a ver, cuando pensábamos que sería para siempre.

  No te guardo rencor, no hubo culpables, fue cosa del destino, el mismo que nos había unido, aquel día decidió separar nuestros caminos. Los dos lo admitimos, la llama se apagó pillándonos desprevenidos, dejándonos a oscuras. Y cuando intentamos volver a encenderla nos dimos cuenta, de que ya no era lo mismo, que esa luz tan solo alumbraba un pequeño hueco, que aquella que nos iluminaba juntos se había apagado para siempre, y que por mucho que lo intentáramos no volvería a ser tan brillante y alentadora como aquella.

  Me gusta ver mi vida desde un punto literario, como si fuera un libro. Y tú y yo no fuimos un capítulo, fuimos muchos más. De esos capítulos que deseas que nunca terminen, de esos que puedes volver a leer una y otra vez sin cansarte de hacerlo, pero de esos capítulos, que acaban.

  Aunque me duela, de vez en cuando me gusta volver a leerlos, volver a sentirme como el primer día, recordarlo todo, porque sí, fuiste mi capítulo preferido, y hasta ahora nadie ha conseguido superarnos.
Y cualquier día aparecerá alguien en mi libro que le vuelva a dar vida a esa llama, y me haga sentir como nadie lo hizo, no mejor que tú, sino diferente.

  Mientras tanto seguiré recordándote, porque lo que nosotros vivimos no se puede comparar con nada, y aunque nada seamos ya, aún sigo buscando esa mirada.
     
                                         

Perras, perras everywhere.

  Lárgate. Sí, vete de mi vida. La has cagado a más no poder, lo has jodido todo por un puto acto de egoísmo. Todo fue perfecto, un sueño, pero tú lo estropeaste, no intentes arreglarlo, ese sentimiento que existía entre los dos murió. Y es que hace tiempo que noto que ya me da igual, que le regales tu boca a cualquier zorra que quieras pillar.

  Sí, hablo de ti guapita. ¿Qué pasa, te va eso de calentar pollas? Si te sientes sola te compras un perro o un vibrador, que los hay de muchas marcas. ¡Oye, que no quiero más zumo! ¿Lo quieres también para ti?
Quédate con las sobras perra, yo me quedo el primer plato. Y es que a diferencia de ti, yo puedo hacerle sonreír con la ropa puesta, pero vamos, ya por mí quédatelo, no me gustan las cosas de segunda mano.

  Una pequeña duda, ¿se la comiste o sólo te lo follaste? ¿Esa cara de malfollada la traías de fábrica o es que no te dan bien lo tuyo? Vas de niña buena y sólo eres una guarra. Una niñata malcriada que folla todas las mañanas. Y por las noches se las chupas ¿no? ¿Qué pasa puta, te das por aludida? Ve preparándote una minifalda y unos tacones, que te van a dar el premio a la más puta de los tiarrones.

  Venga guarra, ve bajando el listón de guarrerías o voy a tener que ponerte bozales. Tápate un poco que te vas a resfriar. Ah, y una última cosa, deja de comer pollas y come más hueso. ¡Perra!

Sonríe (:

  Sonríe. Te has levantado esta mañana y no has sentido nada. Le has visto y tu corazón ha seguido con su ritmo lento y tranquilo, no se ha desbocado. Está con otra, con ella, pero no sientes ganas de llorar, es más, te alegras por él. ¿Sabes lo que eso significa?
Exacto, le has olvidado. Se acabó. Ya no más bajones ni lágrimas por él. Se acabó eso de pensar en un "nosotros".

  Ahora solo pensarás en ti, en tu felicidad, en ver tu sonrisa dibujada en tu cara todos los días. Pensarás en lo que fue, como un bonito recuerdo, solo eso, un recuerdo. Encontrarás a alguien que te haga sentir, no como una princesita de un cuento de hadas, sino una reina de su felicidad. Y no a tres, sino a diez metros sobre el cielo. Le mirarás a los ojos, pensarás que algún día te casarás con el, y te deprimirás, llorarás y sufrirás cuando esto acabe.

  Pero luego volverás a levantarte con más fuerza, volverás a pasar página, porque esto es el libro de tu vida, tienes que vivir cada capítulo como si fuera el último, y pasar página cuando veas que se ha terminado. ¿Qué si va a haber momentos difíciles? Pues claro, los habrá malos y horribles, pero también geniales, perfectos, de estos que desearías volver a repetir, porque al final todo se arregla.

  Y algún día, finalmente, encontrarás a tu príncipe azul, y todo será... Perfectamente imperfecto.
Pero hasta que eso ocurra, sonríe, nunca sabes quién se puede enamorar de tu sonrisa.

Y tú no estás..

  Estoy aquí, sola, sin ti. ¿Dónde estás? Necesito encontrarte. ¿Dónde te has metido? Te has marchado y me has dejado sola en la oscuridad, en esta terrible oscuridad. Hace frío y no tengo tu calor. El camino es largo y estoy cansada de caminar, del dolor. Aún escucho el eco de tu voz, que me susurra que vaya contigo, que me necesitas a tu lado pero, ¿dónde estás? No te encuentro. Quizás sea un reflejo de mi pensamiento, pues hoy te echo de menos...

  Me he levantado a tientas, y he caido a la primera. ¿Dónde te encuentras? Necesito que me ayudes a seguir.
Tengo miedo, y tú no estás aquí. Dime, ¿dónde estás? No te veo.

  No, no quiero reconocerlo. No te has marchado, no para siempre. ¿Dónde te has metido? Esto debe de ser un juego, sí, eso es, enseguida aparecerás con tu sonrisa e iluminaras mi sendero.

  Tengo miedo y frío, no quiero seguir jugando. ¿Dónde te has escondido? Sal ya, te necesito. Por más que grito tu nombre no apareces. ¿Dónde estás? Esto ya no tiene gracia.

  No… no es un juego. Te has ido. Para siempre. ¿Por qué? Sabes que te necesito para seguir, sabes que te quiero. ¿Por qué te has marchado? Te has llevado mi sonrisa, mi felicidad, mis ganas de vivir.   Te lo has llevado todo.

  ¿Por qué lo has hecho? Me has dejado sola, en la oscuridad, y no hay nadie que me proteja. No hay nadie que me de calor y me alumbre el camino. Pero aún sigo escuchando el eco de tu voz.

  ¿Dónde estás? Te necesito, y tú no estás aquí.

Pueees eso.

  ¿Que qué es esto? Esto es un puto camino lleno de baches y piedras. Una puta montaña rusa. Un puto vaivén. Me caigo, y me levanto. Subo y bajo. Primero todo bien, y luego todo mal.

  Y es que sinceramente, estoy harta. Harta de aparentar que te olvidé, que ya no me importas nada y que paso de ti. Harta de sonreír y decir que todo marcha genial, cuando en realidad va a peor. Harta de tener que verte todos los días y no poder dirigirte la palabra. Harta de saber que eres lo peor que me ha podido pasar, pero desearte con todas mis fuerzas. Y es que a veces parece que te olvidé del todo, sí, pero es que tengo que admitir que hay días en los que me resulta más fácil, y que en cambio otros, no puedo ni mirarte a la cara.

  Tengo que admitir que odio verte con otras, que odio que ahora sea a ellas a las que les dices te quiero, a las que les das tu cariño. Y sobretodo, te odio a ti. ¿Y sabes por qué? Por hacer que me enamorara de ti, por conseguir hacerme la más feliz del mundo y luego quitármelo todo, por todo el daño que me has hecho y que a pesar de todo, te necesite conmigo.

  Y es que eres todo lo contrario a como creía que eras. Nunca había imaginado que podías ser así. Nunca creí que alguien pudiera cambiar tanto en tan poco tiempo. No eres el chico del que me enamoré, ni por asomo. Entonces te preguntarás que por qué sigues rondando por mi cabeza, pues la respuesta es muy fácil. A veces, cuando te miro a los ojos o cuando sonríes, creo ver a tu antiguo tú. A ese chico maravilloso que me hizo pasar el mejor mes de mi vida. A ese chico que se colaba en mis sueños todas las noches. A ese chico que me robaba el aliento. A ese chico que ronda por mi cabeza. El chico del que me enamoré.

martes, 10 de enero de 2012

Y nada..

  Hola... Solo llamaba para ver como estabas, para ver si ya me habías olvidado, si tachaste mi nombre y escribiste encima el de otra, para ver si tenías algo importante que decirme, si seguías sintiendo algo, si te sigo importando.

  Y veo que no estás, que tal vez no me quieras coger el teléfono, y si eso es verdad, si es verdad que ya me has olvidado, que otra ocupó tu corazón y tu cabeza, que ahora te acuestas pensando en ella y que es a ella a la que observas con esa mirada; puede que ya no tenga nada que hacer aquí. Que no haya perdido una simple batalla, sino la guerra entera, que sea el momento de pasar página, tachar ahora tu nombre y probar a escribir el de otro encima, que sea el momento de sacarme todo lo tuyo que hay en mí, y devolvértelo, porque ya no me pertenece.

  Aunque... Puede que te parezca una completa estupidez o incluso un poco cabezota, pero me niego a olvidar la otra posibilidad. Esa posibilidad de que tal vez hayas escrito el nombre de otra encima, pero no logres borrar o tapar del todo el mío, de que todo te recuerde a mí, de que no me cojas el teléfono porque no lo escuchaste, de que te acuestes y te levantes pensando en mí, de que añores esos momentos que pasamos juntos, de que me observes con esa mirada a escondidas, de que desees que todo vuelva a ser como antes, de que aún me quieres. Porque yo, sueño contigo, con esa posibilidad, todas las noches. 


  Sí, estúpida cabezota de mí...





viernes, 6 de enero de 2012

Otro día más.

  Y hoy es otro día más. Otro puto día sin tenerte. Sin despertarme mirando tu cara, sin sentir tu aliento en mi cuello, sin abrazarte, sin quedarme embobada mirándote a los ojos, sin besarte.

  Otro puto día echándote de menos. A ti, a tu sonrisa, a tu pelo, a tu aroma, a tu risa, a tus besos, a tus caricias, a tu cariño.

  Otro puto día sin verte. Sin mirarte a los ojos, sin estremecerme cuando me dices palabras bonitas, sin acariciarte el pelo, sin sentir que mi mundo se viene abajo cuando me miras y sonríes.

  Otro puto día deprimiéndome. Deprimiéndome por no poder decirte "te quiero", por no poder tenerte a mi lado, porque me protejas cuando tenga miedo, por saber que me olvidaste, que ya no quieres saber nada más de mi, que ya no existo para ti, que tan solo fui otra más, que ahora quieres a otra.

  Pues ya ves, aquí estoy, aguantando otro puto día más. Pero eso no es lo malo, lo malo es que mañana será peor, y pasado aún más, y así todos los días, cada vez irá aumentando hasta que explote, hasta que me hunda tanto, que ya no sea capaz de levantarme.
Y es que será otro puto día más, sin tenerte, echándote de menos, sin verte, deprimiéndome. Otro puto día más sin ti.